Haro es famoso por estar rodeado de bodegas en las que poder degustar un buen vino, pero también hay otros manjares que podemos llevarnos a la boca, por ejemplo, el queso. De leche de cabra, oveja, vaca o mezcla. Desde el tierno pasando por el semi curado y llegando al curado y los añejos. Texturas y sabores para todos los gustos que puedes descubrir en la Quesería Los Cameros, que, además, elaboran queso DOP Camerano.
Contenido
Visita guiada en la fábrica de Los Cameros
La visita consiste en un recorrido por las instalaciones para ver todos los procesos por los que pasa el queso a la hora de su elaboración. Por cuestión de higiene y motivos sanitarios es necesario llevar mascarilla, excepto en la parte de la cata final.
Las visitas se desarrollan los viernes a las 10:00h y sábados a las 10:30h. El aforo es limitado y es necesaria reserva previa. Los adultos pagan 18 euros y los niños de 6 a 11 años 10 euros. Los grupos se limitan a un máximo de 15 personas.
Tras un video explicativo nos adentramos en las entrañas de la quesería situada en el mismo lugar desde el año 2000. Si tenemos suerte podemos verla en funcionamiento, peor también cabe la posibilidad de que la rotación y cadena de producción estén paradas.
Desde la salida de la leche hasta su salación y posterior ubicación en la zona de secado y curación donde se les da la vuelta casi a diario y se cepilla para evitar el moho que se pueda crear en exceso, ya que su corteza es natural y comestible. Además, elaboran queso DOP Camerano.
Una vez finalizada la visita, se degustan algunos de los quesos ys e tiene acceso a una pequeña tienda donde poder comprarlos, además de aceite de oliva virgen extra de la Finca Malzapato en sus variedades Royuela y Arbequina.
Qué ver en Haro
Como ya comentaba, una visita a una bodega es un plan ideal y también hacer una ruta de pintxos. Haro no es muy grande y también el famoso por la Batalla del Vino que se celebra anualmente a finales de julio.
Cerca encontrará pueblos de la Montaña Alavesa como Payueta o Peñacerrada, además de grandes ciudades como Logroño o Vitoria. Lo que queda patente es que en La Rioja se come fenomenal y que los productos de kilómetro 0 abundan, cosa fantástica para nuestra salud y para la sostenibilidad de nuestro planeta.
La Rioja es mucho más
Mucho más que viñedos, queserías, pintxos y pueblos con encanto. Es las jornadas de la Verdura de Calahorra, los vuelos en parapente o Globo, el Camino de Santiago, sus Paradores, Hoteles y Albergues… es historia viva de una región rica en cultura, gastronomía y tradición.
En pueblos como Munilla encontrarás mercados de antiguedades, las pozas naturales de Arnedillo te harán relajarte y la huerta calagurritana cubrir el placer de todos tus sentidos. Ciudades como Logroño acogen a cigueñas y peregrinos cada año, además de tener una Sierra de Los Cameros apasionante de la que espero poder hablarte más pronto que tarde. Una comunidad con identidad propia a la que siempre es buena idea volver.